En la recta final hacia las primarias en Jujuy, el escenario politíco
se encuentra atravesado por crisis y realineamientos. La rebelión del pueblo
jujeño contra la reforma constitucional, la defensa del territorio y el derecho
a la protesta, también ha servido para delimitar posiciones y, en ciertos
casos, encubrir algunas.
Morales presenta el cuadro de bancarrota nacional, pero esconde bajo la
alfombra la realidad que viven los trabajadores en Jujuy. Es una provincia
hipotecada por una altísima e ilegal deuda en dólares (también la tiene, y muy
abultada, en pesos). La legislación represiva busca regimentar la protesta
social, mientras la reforma constitucional reaccionaria pretende asegurar los
intereses de los pulpos mineros y los terratenientes. Según un informe del
Ministerio de Trabajo, Jujuy es una de las provincias que menos empleo ha
creado desde 2019 a la fecha, lo que deja al desnudo que el mentado “cambio de
matriz productiva”, con la explotación del litio, el parque solar y el cannabis
medicinal, sólo ha sido un fenomenal negocio para un sector del capital,
mientras la mayoría de la población jujeña sigue subsumida entre la miseria y
la pobreza. Morales ha llevado adelante una reforma laboral en los hechos,
quitando conquistas históricas y eliminando miles de puestos de trabajo
calificado, acentuando el cuentapropismo y la mal llamada ‘economía popular’.
El vaciamiento en salud y educación están a la vista, con una histórica lucha
docente que quebró siete años de paritarias por decreto y a la baja. En salud,
el vaciamiento de la salud publica va de la mano del vaciamiento del Instituto
de Seguros, la obra social más grande de la provincia, que cubre la atención
sanitaria a todos los trabajadores estatales. A la reducción de prestaciones,
se ha sumado un conflicto con todos los colegios profesionales, por lo cual
están dejando de atender a los afiliados, en una clara manifestación de que el
ajuste y la pauperización de las condiciones de vida no solo se limitan a
salarios miserables, sino que la crisis social afecta a la salud, la educación
y también a la vivienda –prácticamente ausente en los ocho años de gobierno-.
Las PASO del Morales
Desde ya la crisis y la rebelión jujeña han condicionado la campaña
electoral, al punto de que el oficialismo no ha podido realizar ningún acto
público ni recorrer la provincia. Se ha limitado a una serie acotada de actos
en lugares cerrados y con fuerte control policial de ingreso y en las
inmediaciones.
El oficialismo jujeño, por primera vez desde 2015, va a una interna.
Por un lado, la lista radical alineada con Morales-Larreta lleva de candidato a
senador a Mario Fiad y como diputado nacional a ‘Colo’ Rizotti, mientras que
detrás de Bullrich se presenta la periodista Rosario Agostini, quien ha tomado
reconocimiento en el último periodo por sus denuncias contra Milagro Sala y por
sus colaboraciones con Canal 13-Lanata y otros medios. Esta es la primera
interna que tiene Gerardo Morales en la provincia, y se produce luego de la
imposición de una reforma constitucional con una brutal represión. Esta interna
puede significar el intento de contención de los votos de un sector del
oficialismo o el inicio de un desarrollo político por fuera de la camarilla de
Gerardo Morales
PJ
La crisis al interior del PJ no podría ser más aguda. Luego de
acompañar la votación de la reforma constitucional, sobrevino la intervención
federal del partido, para intentar desligarse de las responsabilidades de este.
Se han presentado tres listas en la interna del PJ: la que encabeza el ex
presidente del peronismo jujeño, Rubén Rivarola; la lista de la diputada
nacional Carolina Moisés y el actual senador nacional, Guillermo Snopek, y la
de la camporista Leila Chaher y Alejandro Snopek. Por una serie de denuncias
cruzadas, en un principio ninguna lista iba a estar “enganchada” con la boleta
nacional de Sergio Massa: la de Rivarola por la crisis y posterior
intervención; la de Guillermo Snopek, como represalia por no haber dado quórum
en el Senado cuando se intentó tratar la continuidad de la jueza Huerto, clave
para la causa Hotesur, y en el caso de Leila Chaher, por una denuncia de la
lista de Moisés-Snopek. Esta crisis tuvo que ser parcialmente saldada por el
propio Massa, que entendió que no se podía dar ninguna ventaja en estas elecciones,
y terminó acordando con las listas de Moises-Snopek y la de Leila-Snopek en una
boleta completa a todos los cargos. Guillermo Snopek, quien quebró el bloque
oficialista para formar Unión Federal junto a otros cuatro senadores, ha
utilizado este mecanismo extorsivo para conseguir algunas concesiones de
ocasión. Con el PJ intervenido y con la boleta de Massa pegada, el senador
Snopek ha vuelto a darle quórum a Cristina en el Senado. La camporista Chaher
va a la elección pegada a las dos boletas, aunque solo hace campaña por Massa.
Tanto la lista de Moisés-Snopek como la de Chaer-Snopek, pretenden
diferenciarse de Rivarola, caído en desgracia, aunque con chances de imponerse
en las PASO por su manejo del aparato y del territorio. Todos sus adversarios han
salido de su propio riñón.
El interventor federal del PJ, Aníbal Fernández, ha dispuesto la
‘amnistía’ a todos los afiliados suspendidos o que hayan participado de las
elecciones por otras fuerzas, lo que habilita inclusive al actual
vicegobernador de Cambia Jujuy, Haquim, y a toda la claque peronista que
integró el gobierno de Morales a volver al PJ. Es un capítulo abierto que
espera definición.
A todo esto, se suma una cuarta lista, la del ex Rector de la
Universidad de Jujuy, Rodolfo Tecchi, que va con la personería de MILES, que
lleva la fórmula presidencial de Guillermo Moreno.
Milei y su casta
Una de las novedades en estas elecciones es la presentación de Avanza
la Libertad en Jujuy. Para las provinciales, Milei había establecido un acuerdo
con un partido local, VIA, pero terminó quitando el apoyo ante la posibilidad
de un fracaso electoral que mellara su figura, como pasó en otras provincias.
Finalmente, el partido que puso la personería para que Milei presente
candidatos es el Partido Renovador Federal, que anteriormente integró el frente
que llevó a Morales al gobierno y que llevaba la candidatura de Massa a
presidente. Su candidato es Manuel Quintar -empresario que viene de una familia
que se ha enriquecido con negocios con el Estado-, que viene de ser candidato a
diputado provincial por el PJ. La casta esta más vigente que nunca alrededor
del ‘peluca’ Milei.
FIT-U
La izquierda va a una interna en el marco de una campaña de
características multimillonarias y, encima, sin un contenido programático
socialista. Ha utilizado la rebelión jujeña en función electorera o para saldar
cuentas internas. Estas visitas no han servido para aportar nada a la lucha en
general, sino que ha sido utilizado para grabar spots de una campaña electoral.
Ninguno de los partidos del FIT-U se ha delimitado de la orientación
juficialera kirchnetista que desenvuelve el Tercer Malón de La Paz (el Tercer
Malón reclama la intervención federal de la provincia y la intervención de la
Corte Suprema). Para arrimar votos para Vilca no vacilan en el oportunismo. Es
el ´voto útil´ sin principios.
Política Obrera ha realizado agitaciones callejeras y en las ferias,
también en el interior y charlas en las barriadas. Los trabajadores debemos
enfrentar esta orientación reaccionaria que traen los candidatos patronales.
Vamos a estas PASO con la boleta de Marcelo Ramal y Patricia Urones, y la
boleta del Parlasur que integramos algunos compañeros de la regional de Jujuy,
para defender una perspectiva que vincule la necesidad de un reagrupamiento
político socialista de los activistas con la rebelión del pueblo de Jujuy.
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